Te voy a encontrar.
No importa que no estés en celo.
Tu olor no lo desvanece la lluvia.
No lo lava.
Eres inmortal en mi olfato.
Te busco. Jadeante.
Decidido a destrozar tu carne.
Hasta que no quede nada de ti.
Tan solo el rastro
de tu sangre en la nieve.
Debo recordar cómo aullar
para alejar tu instintivo miedo
a que vuelva a morderte de nuevo.
Romper la oscuridad,
con el destello de mis ojos.
Regalarte esa última luz
antes que nuestra la lucha
torne todo rojo y negro.
MANICOMIO 237
Hace 5 horas.